domingo, 13 de febrero de 2011

Tarea: Comentario del Popol Vuh


Popol: “reunión”, “asamblea”, “casa”

Vuh: “libro” o “papel”

Al leer la información que se había dado sobre el Popol Vuh, se puede decir que se podría parecer a los mitos que existían en la antigua Grecia, ya que ellos trataban de explicar la creación del mundo con varios dioses. Se ve que en el Popol Vuh, se usaron cosas de la vida diaria de los mayas, explicado de forma grandiosa para explicar la razón de los fenómenos que ocurrían.

Este cuento se trata de la creación de la tierra y de la cultura quiché y maya, desde el comienzo, que en donde decían que solo había oscuridad, silencio, y caos. Se explica la creación de la tierra, las montañas, los animales, y el difícil reto de crear al ser humano, para que alabara a los dioses, la cual les tomo varios intentos, pasando de un hombre de barro, a uno de madera, hasta crear el ser humano del maíz, la cual hace cuatro hombres perfectos y mujeres, para poder engendrar la raza quiché.

Este cuento aunque no es el original, es el más cercano al original que hay, ya que esto fue preservado de manera oral, y de esa manera pudo llegar a las manos del misionero Fray Francisco Ximénez, quien lo tradujo al español.

Como los demás mitos y leyendas, el Popol Vuh también tiene una gran cantidad de valores, incluyendo los valores religiosos, los cosmológicos, los antropológicos, los étnicos y los éticos. En la cultura maya, este era uno de los cuentos más importantes por la gran cantidad de valores que contiene.

En los primeros dos capítulos que dan el libro básicamente se trata de que el mundo en el comienzo, en donde no había nada excepto el cielo y el agua, hasta que los dioses Tepeu y Gucumatz, hablaron, y empezaron a llenar el mundo, haciendo que hubiera tierra y montañas. Después, decidieron hacer los arboles y los animales. Pero cuando vieron que ellos no alababan a los dioses, decidieron crear un animal que pudiera hablar. El humano. Al primer intento, el humano fue hecho de lodo, pero no podía moverse ni hablar, así que lo deshicieron. Al segundo intento, consultaron a otros dioses, y decidieron intentar otra vez, pero con madera. Pero estos humanos no tenían alma, y por eso se olvidaron de quienes los había creado y por eso cayeron en desgracia.

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